
* En víspera de la clausura del XVII Festival Cultural Ceiba “Vive el Sureste” un gran público asistió al concierto
Durante casi dos horas, la Orquesta Filarmónica de Tabasco interpretó 13 piezas, entre clásicas y populares, para un inesperado público que no salía de su asombro en el Foro 1 “Vive el Sureste” al escuchar las canciones habituales en sonoro y señorial concierto titulado “Mosaico Musical de Mi tierra”.
Los 43 músicos, dirigidos por el director invitado, Alfredo Hernández Reyes, acometieron con virtuosismo e intuición, dos desafiantes piezas, el “Danzón Número 2”, del compositor sonorense Arturo Márquez, y “El Huapango”, del maestro tapatío José Pablo Moncayo.
Con este par de interpretaciones, invención que vino a dar paso a dos nuevos géneros musicales: el danzón y el huapango orquestal, el agasajo musical estaba servido.
La segunda pieza, con la mezzosoprano Ivonne Acuña abrazada por violines y clarinetes, el tantas veces oído bolero “Cuando vuelva a tu lado”, fue un prodigio nuevo, dolorosamente bello para los asistentes que no resistieron hacer segunda.
En la tercera interpretación, la mezzosoprano de origen cardenense, fue Reina de la Noche: solfeó “Tierra nueva”, del compositor Pedro Luis Bartilotti. Fue como si el público escuchara cantar el viento, acompañado por momentos del solfeo del mar.
El director Alfredo Hernández contaría al final del concierto, que tuvieron la autorización de la hija del compositor para que Ivonne interpretara la pieza de Bartilotti. El maestro Alfredo tuvo que hacer los arreglos porque no había partitura, escuchando la composición en un disco grabado hace más de 20 años.
Al presentar a los integrantes, el director invitado refirió que los 43 miembros de la Filarmónica de Tabasco son todos tabasqueños y tienen distintas profesiones: algunos son médicos, otros abogados, otros licenciados, paramédicos y así. "Es la orquesta de los oficios", dijo en tono alegre.
Cuando la Orquesta Sinfónica de Tabasco ejecutó "México lindo y querido", se aventaron al ruedo todas las voces de todas las edades, agregando las palmas, como un instrumento más de la agrupación, en una arrolladora interpretación de más de 350 almas.
Apenas acabó la interpretación colectiva, el director calificó a los asistentes: "Creo que han pasado la audición para el próximo coro de Villahermosa".
El corazón se infló de orgullo en tiempos de la trompada con el Huapango de Moncayo mientras en la pantalla panorámica se proyectaban cúpulas de iglesias, máscaras danzantes, tejados a dos aguas, cactus, magueyes, escaramuzas, ríos y atardeceres.
A cada pieza, los asistentes pudieron sentir el protagonismo rotativo de timbales, oboes, violines, piano, batería, etc. La Orfitab se despidió con un popurrí que hizo de lo sinfónico el ritmo de la noche.
Comunicado 189/2024
Villahermosa, Tabasco
Domingo 01 de diciembre 2024