- El Instituto Estatal de las Mujeres presentó segunda parte de círculo “Cómo visibilizar a las mujeres migrantes en el marco de derechos humanos de la ONU”
- Ofrece capacitación la especialista en Comunicación para el Desarrollo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Laura Cabello.
- En el marco de las actividades del 25 Día Naranja, se analiza situación de mujeres migrantes y los factores que las orillan a salir de sus lugares de origen.
Este lunes se presentó la segunda parte del círculo de reflexión “Cómo visibilizar a las mujeres migrantes en el marco de derechos humanos de la ONU”, a cargo de la especialista en Comunicación para el Desarrollo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Laura Cabello.
Justo en este 25 Día Naranja, que se creó para actuar, generar conciencia y terminar con cualquier tipo de violencia contra las mujeres, la especialista internacional volvió a abordar la perspectiva que tiene la OIM respecto a las mujeres migrantes, quienes salen de sus lugares de origen por diversas razones, como la violencia que sufren en su ámbito familiar.
Recordó que en la primera parte del círculo dijo que una de las principales columnas que tienen en Naciones Unidas es la Declaración Universal de los Derechos Humanos, por lo que en 1946 inició una nueva era para las mujeres en el todo el mundo, porque después de dos guerras mundiales surgieron nuevas formas de construir paz y construir estabilidad.
Laura Cabello mencionó que se dio la primera asamblea de la ONU en Londres, porque se estaba dando un nuevo orden mundial. Y ahí un personaje fundamental para la historia de las mujeres fue Eleanor Roosevelt, quien fue la primera mujer que formó parte del Primer Comité de Derechos Humanos que se formó en esa primera asamblea.
Aseguró que dos artículos de esa declaración son importantes en el ámbito de las mujeres migrantes: Artículo 13, que dice que toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado.
“Y el Artículo 22, que señala que toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo, y a la protección contra el desempleo”, puntualizó la también licenciada en Relaciones Internacionales y colaboradora de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Destacó que desde 1946 se creó la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW, por sus siglas en inglés), que es el principal órgano internacional intergubernamental dedicado exclusivamente a la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer.
Detalló que las CSW se reunió, por primera vez en febrero de 1947, y busca promover el adelanto de la mujer en todo el mundo. Documenta la realidad que viven las mujeres, elabora normas internacionales en materia de igualdad de género y empoderamiento de las mujeres, lidera debates con líderes mundiales, y crea informes con recomendaciones.
Puntualizó que uno de los más importantes acuerdos de la comisión es la Norma CSW 66, que pretende lograr la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas en el contexto de las políticas y programas del cambio climático, medio ambiente y reducción del riesgo de desastres.
La especialista en Comunicación para el Desarrollo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) indicó que la norma pretende el empoderamiento económico de la mujer en el cambiante mundo del trabajo; las medidas para hacer frente a la informalidad creciente del trabajo y a la movilidad de las trabajadoras; y fomentar la transición al empleo formal para las mujeres que trabajan en empleos remunerados del sector no estructurado.
“Aprobar políticas y leyes nacionales en materia de migración que tengan en cuenta el género, en consonancia con las obligaciones pertinentes en virtud del derecho internacional, a fin de promover el empoderamiento económico de las trabajadoras migrantes en todos los sectores y proteger sus derechos humanos”, definió.
La representante internacional enfatizó que de acuerdo al informe mundial sobre las migraciones 2022 de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) se dieron 281 millones de migrantes internacionales, que representa 3.6% de la población mundial; y 135 millones de ese número de migrantes son mujeres y niñas.
“Algunos factores que impulsan la migración de mujeres en América Central y el Caribe son diversas y oscilan entre la búsqueda de mejores oportunidades, reunificación familiar, el intento de evitar o salvaguardarse de la violencia que pasa en sus comunidades o al interior de sus familias, sumado a la discriminación y a la violencia por motivos de género”, afirmó.
Laura Cabello invitó a todos los que tengan interés por conocer a mayor detalle más información sobre la situación de las mujeres migrantes, visitar las redes tanto de la Organización Internacional para las Migraciones o de la propia Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer de la ONU, en las que encontrarán más estadísticas.