
- El Instituto Estatal de las Mujeres llevó a cabo foro en el marco de las actividades de los 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género
- Participan las doctoras María Guadalupe Chávez Villaseñor y Karla María Vinagre Ramírez, quienes cuentan con amplia experiencia en la materia
Para continuar con las actividades de los 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género, el Instituto Estatal de las Mujeres (IEM) realizó este viernes el foro “El derecho a la atención de la salud de las mujeres”, en el auditorio del Centro de Especialidades del Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (ISSET).
En la charla participaron las doctoras María Guadalupe Chávez Villaseñor, médica general del Hospital General de Cárdenas, y Karla María Vinagre Ramírez, directora general del Hospital CESSA de Bosques de Saloya, Nacajuca.
Esta ocasión fungió como moderadora, la jefa de Trabajo Social del ISSET, María Fabiola Romero Hernández.
Durante el foro, las invitadas especiales respondieron diversas preguntas sobre la atención que se brinda a las mujeres en materia de salud, y de acuerdo a la experiencia que han adquirido a lo largo de su trayectoria profesional y siempre en atención a los tabasqueños.
Con la pregunta en qué consiste la violencia obstétrica, la médica general del Hospital General de Cárdenas aseguró que durante sus estudios en Derecho Sanitario, se tituló que con una tesis sobre violencia obstétrica, pues en el inicio de su carrera se percató del daño que sufren muchas mujeres durante el proceso de embarazo y al momento de dar a luz.
“Decidí hacer esa tesis, porque me impresioné del maltrato que sufrían muchas mujeres de parte de los profesionales de la salud, desde los médicos, enfermeras y personal de apoyo. Era impresionante el maltrato que sufrían durante su trabajo de parto”, afirmó la egresada de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Dijo que es un tema que la marcó desde los inicios de su profesión, por lo que nunca ejerció ese maltrato a las mujeres, porque llegan en la peor etapa del dolor físico.
Además señaló que en su proceso le tocó ver cómo eran violentadas mujeres desde el punto de vista obstétrico, con violencia física y malos procedimientos médicos.
Por su parte, la directora general del Hospital CESSA de Bosques de Saloya, Nacajuca, contestó la pregunta de cuáles eran los servicios de atención especializada que se brindan en el nosocomio a su cargo.
Explicó que la unidad a su cargo es de primer nivel, pero con una atención muy completa.
Vinagre Ramírez detalló que cuentan con áreas de atención a mujeres de psicología y una clínica de violencia, siendo la única unidad del municipio de Nacajuca que cuenta con ese tipo de clínica, en la que se brinda atención oportuna y con calidad a las mujeres que están sufriendo algún tipo de violencia, ya sea física o psicológica.
En la interrogante sobre cuál es la ruta de atención cuando se trata de un asunto de violencia, mencionó que en el primer nivel en un principio se debe detectar el tipo de caso de violencia, porque si no se detecta bien, no se podrá dar un buen seguimiento.
“Si la paciente trae una alteración y viene viviendo violencia en su casa y no se detecta, se puede ir sin haber hecho el diagnóstico. Lo puede detectar un médico de consulta continua o externa mediante una entrevista o un cuestionario, Si se detecta un caso, se le da seguimiento y se le brinda todo el apoyo psicológico”, manifestó Vinagre Ramírez.
Por su parte, la doctora María Guadalupe Chávez hizo una diferenciación entre negligencia médica y violencia obstétrica, definiendo a la primera como una mala praxis médica, cuando un presunto profesional no sabe realizar su labor y la lleva a cabo, o cuando, por ejemplo, un médico tiene prisa por irse, y hace una mala práctica.
En lo que toca a la violencia obstétrica, sentenció que las cesáreas también están consideradas dentro de este rubro, pues el promedio en nuestro país es de 30 a 50 por ciento de cesáreas, cuando muchas de ellas se pueden evitar con partos naturales, porque no se quiere tener a las mujeres con varias horas de trabajo de parto.